Perfil psicológico de Miguel Ángel Yunes Linares realizado en el 2001 antes de ingresar a la Subsecretaría de Seguridad Pública. El examen no podía realizarse por una dependencia del Gobierno Federal, así que fue realizado por un psicólogo privado de un centro de estudios psicológicos en el estado de Florida, en Estados Unidos.
El reporte describe a Miguel Ángel Yunes Linares de la siguiente manera:
Miguel Ángel Yunes Linares pertenece al tipo de “personalidad autoritaria”, que presupone una individualización en condiciones de inseguridad.
Miguel Ángel Yunes Linares piensa que las circunstancias de la vida son más fuertes que él, por tanto atribuye a circunstancias externas sus propios fracasos. Se siente rodeado por un mundo hostil, frente al cual reacciona con excesiva agresividad.
Su estructura yoica es débil, por lo que tiene una tendencia compensatoria a crear un yo “inflado”, que exhibe el alto grado de integración que no posee en realidad. Es el reflejo del deseo de seguridad, que lo lleva a la necesidad de autoafirmación y superioridad.
También presenta fuerte instinto de represión, mecanismo de defensa más importante entre los resultantes del gran número de privaciones y frustraciones que ha sufrido.
Otra característica de Miguel Ángel Yunes Linares es su indiferencia, quizás hasta aversión, con respecto a las tendencias humanas fundamentales, como el alimentarse, o incluso el tener relaciones sexuales. Frente a ellos se presenta a sí mismo como el ideal ascético, con actitud de superioridad frente a los “placeres vulgares”.
Las capas de su personalidad revelan ambivalencia. En la capa más profunda se encuentran tendencias inmorales, antisociales, anárquicas, e inseguridad.
Debido al mencionado proceso de individualización en condiciones de inseguridad, Miguel Ángel Yunes Linares desarrolló un egocentrismo desmedido. Se preocupa mucho por sí mismo, y necesita ser objeto de amor y atención de todos. Su fórmula representativa es “Nadie me ama… por eso me amo a mí mismo”.
Sufre fuertes propensiones a la paranoia. Su necesidad de autoafirmación se descarga en forma violenta, mediante la fórmula “Si ustedes no me aceptan/aman, los obligaré a hacerlo”. Para él, el mundo sólo podía dividirse en seguidores o enemigos.
La personalidad de Miguel Ángel Yunes Linares está basada además en la acción mesiánica en todos los aspectos de la vida. Se considera a sí mismo salvador de su pueblo, portador de sus ideales y esperanzas, el único capaz de cumplirlas.
Otra de sus características distintivas fue la autosifuciencia. Es incapaz de salir al encuentro con los demás, y su orgullo no le permite aceptar ayuda de nadie.
Toma él solo las decisiones, y no admite discusión para ello. Frente a un grupo, es directivo y rígido en el planteo de contenidos y, sobre todo, de procedimientos, sin tener en cuenta otras ideas. No admite discusión en la forma de desarrollo de las tareas, sólo asume la distribución de roles, imparte órdenes y limita a los demás a cumplirlas.
Su fuente de poder reside principalmente en la coerción, es decir la posibilidad de recurrir a la obligatoriedad de la acción, pero también es fundamental el sistema de recompensas y castigos, que reparte casi arbitrariamente, y que utiliza como fuente de miedo pues, normalmente, el castigo es la muerte.
De este perfil podemos deducir dos cosas muy importantes, la primera, que el gobierno federal esta lleno de corrupción, pues, una persona con este perfil psicológico, no puede estar capacitado para dirigir una dependencia federal. La segunda es que, Miguel Ángel Yunes Linares es un peligro para cualquier sociedad en el estado y el país; el forma parte de un tipo de ideología fascista que busca implementar el gobierno federal en nuestro país.
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